Con un profundo pesar, comunicamos a todos los socios y socias de la SChEC el sensible fallecimiento de nuestro socio honorario, el Dr. Norman Lederman. Tras una repentina y fulminante enfermedad nos dejó el viernes 26 de febrero, con el desconsuelo de su esposa, la Dra. Judy Lederman, igualmente socia honoraria de nuestra Sociedad. Aunque se había retirado recientemente de la dirección del programa de doctorado en educación científica del Instituto Tecnológico de Illinois (IIT) en Chicago, seguía trabajando activamente en la consolidación de un sinnúmero de proyectos en educación científica.
Norman siempre se presentaba como profesor de biología (y algo de química, decía), porque efectivamente hizo clases por varios años en educación media. Le fascinaba la ciencia y le encantaba enseñarla. Por lo mismo, su grado de magíster fue en educación secundaria (1977) y su grado de doctor lo obtuvo en educación científica (1983). Desarrolló una exitosa carrera académica en Estados Unidos, llegando a fundar el Departamento de Educación de Matemáticas y Ciencia del IIT en 2001. Desde allí realizó un aporte permanente y significativo a la investigación en educación científica, la formación de profesores de ciencia y la promoción de decenas de investigadores que tienen reconocido liderazgo internacional. Editó el primer libro sobre Conocimiento Pedagógico del Contenido en Ciencias en 1999 (gracias al cual conocemos el modelo de Magnusson), aunque es mucho más conocido por su investigación y promoción de la enseñanza y el aprendizaje de la Naturaleza de la Ciencia. Su aporte en tales áreas fue valorado en muchos países, siendo convocado para la formación de profesores y formadores en Taiwán, Suecia, Sudáfrica, Hong-Kong y varias regiones de China.
Recibió muchísimos reconocimientos y lideró las principales asociaciones estadounidenses e internacionales relativas a la educación científica, como NSTA, ESERA y NARST. Su aporte fue reconocido incluso por la comunidad científica, siendo elegido miembro de la American Association for the Advancement of Science (AAAS) en 2009. Tal experiencia la puso a disposición de nuestro propio país, cuando en noviembre de 2013, junto a Judy, asesoró de cerca la puesta en marcha de la Sociedad Chilena de Educación Científica, estando presente en su fundación y primer Congreso al año siguiente. Su interés por mejorar la calidad de la educación científica era de carácter mundial y tuvo una especial empatía con Chile. A través de los años participó en numerosas iniciativas de formación docente dictando charlas, talleres y seminarios en varias regiones y universidades del país. Aceptó con gusto participar en libros publicados en español sobre didáctica de las ciencias, que han facilitado la difusión del conocimiento de la Naturaleza de la Ciencia y la Indagación Científica en la formación de profesores chilenos y su incorporación en las salas de clases.
Fue un investigador incansable, publicando más de 200 artículos y 46 capítulos de libros. Junto a Sandra Abell, fue el coeditor del Handbook of Research on Science Education, volúmenes I (2007) y II (2014), y preparaba un tercer volumen junto a Dana Zeidler y Judy Lederman. Su trabajo ha sido enormemente citado, como consta en los índices de Google Académico y Web of Science. Su investigación fue siempre rigurosa, innovadora, relevante e inquisitiva. Con una auténtica convicción en la colaboración, como demuestran sus publicaciones junto a colegas de todo el mundo o los proyectos internacionales que desarrolló recientemente sobre visiones de indagación científica de estudiantes de educación básica y media con especialistas de cerca de 25 países.
También fue un gran mentor, capaz de sacar lo mejor de cada uno de sus estudiantes de posgrado. Era capaz de recordar el primer trabajo publicado sobre casi cualquier tema de nuestro campo y traerlo minutos más tarde para discutirlo. Enseñaba usando los mismos principios sobre los que escribía. Era exigente, pero tremendamente generoso. Dejó una huella imborrable en muchos de los que lo conocimos como discípulos o colegas. Los que fuimos sus amigos.
Seguía con interés la puesta en marcha del primer Doctorado en Didáctica de las Ciencias que la PUCV está por iniciar este mes, del cual ya había aceptado ser profesor visitante.
Ahora, solo nos corresponde agradecer, difundir y continuar su legado. Acompañamos a Judy Lederman y le enviamos nuestro cariño a ella y a un innumerable grupo de colegas de la educación científica alrededor del mundo que hoy lloran a un amigo, colega, mentor y referente. Realmente lo extrañaremos mucho.
Algunos de sus aportes en SChEC:
Workshop: “Las Sociedades de Educación Científica»
Conferencia Clausura Congreso SChEC 2015